La operación de próstata para el tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata consiste en eliminar la obstrucción de la uretra causada por el adenoma prostático.
Dependiendo de la técnica quirúrgica utilizada, la liberación del conducto uretral puede realizarse con láser, resección o liberando haciendo uso de implantes uretrales.
Sea cual sea la operación de próstata escogida, el único objetivo que se busca es aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente.
Una de las patologías más comunes en hombres de avanzada edad, sobre todo si nos fijamos en enfermedades de carácter urológico, es la hiperplasia benigna de próstata. La HBP consiste en el aumento excesivo del tamaño de la próstata causando la obstrucción de la uretra y la aparición de síntomas molestos relacionados con la micción. Esto es debido a la situación de la próstata en el cuerpo humano, ya que se encuentra justo a la salida de la vejiga y atravesada por la uretra.A medida que el tamaño de la pórstata aumenta los síntomas de la HBP se van agravando llegando a un punto en el que ni los tratamientos farmacológicos ni los cambios de hábitos permiten llevar una vida normal. En este caso, la operación de próstata para reducir el tamaño de la próstata se torna necesario.
Para ello, existen varias técnicas quirúrgicas que permiten aliviar los síntomas. A continuación explicamos en qué consisten las diferentes operaciones de próstata:
¿En qué consiste la operación de próstata con láser de Tulio?
La operación de próstata con láser de tulio, es la intervención con láser más moderna del mercado actual. Las características de esta técnica quirúrgica permiten una recuperación mucho más rápida, una estancia hospitalaria mínima (no supera el día de estancia en la gran mayoría de casos) y minimiza las posibles complicaciones asociadas a la cirugía.
Para llevar a cabo la operación de próstata con láser de tulio, el urólogo llevará a cabo los siguientes pasos:
- Una vez el paciente se encuentra bajo los efectos de la anestesia, el cirujano procederá a introducir un cistoscopio lubricado a través de la uretra (la cual será dilatada previamente) hasta alcanzar la zona obstruida por la próstata.
- Para poder maniobrar con mayor facilidad durante la operación de próstata, el cirujano introducirá un líquido seroso por la uretra y hasta la vejiga con la intención de expandir las paredes de la vejiga y la uretra. Este paso es vital para que el cirujano pueda observar con claridad el interior del conducto uretral del paciente y realizar la operación de próstata con la mayor seguridad y eficacia.
- A continuación, mediante un endoscopio flexible, el urólogo introducirá la fibra de haz láser junto con una pequeña cámara conectada mediante fibra óptica a un monitor. En este tipo de intervención de carácter mínimamente invasivo, el cirujano procede a reducir el tamaño de la próstata sin necesidad de cirugía abierta, realizándolo todo mirando el monitor.
- Esta operación de reducción de tamaño de próstata se puede realizar mediante dos tipos de técnica quirúrgica, la vaporización de próstata o la vaporresección de próstata. El uso de una u otra dependerá de la decisión del cirujano.
- La vaporización de próstata con láser de tulio consiste en focalizar el haz láser sobre la zona de tejido prostático que se quiera eliminar. El calor producido por el láser calienta el agua intracelular del tejido hasta temperaturas superiores a 100 grados, lo que causa su evaporación junto con el resto del material celular. Además de ello, una de las características principales del láser de tulio es que el calor que se dispersa hacia las zonas de tejido adyacentes a la porción vaporizada causan un efecto hemostático que reduce casi al mínimo el sangrado intraoperatorio.
- Por otro lado, la vaporresección prostática funciona con el mismo principio de la vaporización, con la diferencia de que en esta técnica el cirujano busca cortar trozos de la próstata para poder extraerlos y realizar un estudio de laboratorio del mismo. Esto se realiza en los casos en los que se desea observar la posibilidad de que existan células cancerosas.
- Una vez el cirujano observa por el endoscopio que ha eliminado todo el tejido prostático necesario extraerá el endoscopio y la fibra de haz láser para después introducir una sonda vesical. Esta sonda deberá ser llevada por el paciente entre 4 y 7 días dependiendo de la cantidad de tejido vaporizado. El paciente podrá abandonar el hospital al día siguiente.
¿En qué consiste la operación de resección transuretral de próstata?
La operación de resección transuretral de próstata es la intervención para el tratamiento de la hiperplasia benigna más utilizado de la historia, siendo ya más de 70 años los que han pasado desde la primera vez que se utilizó. Esta operación de próstata consiste en la resección de la próstata con resectoscopio a la vez que se coagula el tejido restante mediante impulsos eléctricos. Como su nombre bien indica, esta operación de próstata se realiza a través de la uretra y no requiere cirugía abierta.
A continuación explicamos brevemente en qué consiste la operación de resección transuretral de próstata paso a paso:
- En primer lugar se le administra la anestesia al paciente, que puede ser regional o general dependiendo de las características del paciente. Una vez la anestesia hace efecto, siguiendo los mismos pasos que en la operación de próstata con láser de tulio, el cirujano introducirá un cistoscopio debidamente lubricado a través de la uretra dilatada hasta llegar a la zona de la próstata.
- Tras ello, el urólogo procederá a introducir una solución salina en la uretra y la vejiga para mantenerlas expandidas y facilitar su maniobrabilidad.
- Siguiendo el mismo proceso que con el láser de tulio, el cirujano introducirá un endoscopio flexible, que consta de una luz y una cámara en su extremo distal, con un resectoscopio en su interior.
- A través de una pantalla, visualizará la próstata y mediante el resectoscopio irá cortando pedacitos de próstata a la vez que sella los vasos sanguíneos mediante electricidad, reduciendo así el sangrado.
- Una vez se ha extraído todos los restos de próstata que se necesiten y se haya reducido el tamaño de la misma hasta que el conducto uretral esté liberado, se extrae el instrumental y se coloca un catéter para que fluya la orina y eliminar los restos que puedan haber quedado en la zona. El paciente deberá permanecer en el hospital entre 1 y 3 días y utilizar la sonda hasta 10 días en algunos casos.
¿En qué consiste la operación de próstata con liberación uretral (Sistema Urolift)?
La operación de próstata con liberación uretral (Sistema Urolift) es la única cirugía que permite aliviar los síntomas de la hiperplasia de próstata haciendo uso de una operación de carácter ambulatorio. Además, permite conservar la función sexual completa (erección y eyaculación) y no tiene problemas de incontinencia urinaria.
Esto se consigue gracias a que la operación de próstata con liberación uretral consiste en la colocación de entre 2 y 6 implantes en la próstata que permiten comprimirla de modo que se elimina la obstrucción de la uretra.
Para llevar a cabo esta intervención de próstata tan sólo se necesita anestesia local y sedación del paciente para dormirle, pudiendo abandonar el hospital unas pocas horas después de la cirugía con una mejora inmediata de los síntomas.
De cara a entender mejor en qué consiste la liberación uretral de próstata con el sistema urolift, a continuación la explicamos paso a paso:
- En quirófano, se procede a administrarle al paciente anestesia local en la zona y una ligera sedación para que se duerma durante el procedimiento.
- A continuación, con previa dilatación de la uretra, se procede a introducir un cistoscopio lubricado a través de la uretra hasta llegar a la próstata.
- Para conocer exactamente que lóbulos prostáticos son los que impiden el correcto fluir de la orina obstruyendo la uretra, el cirujano utilizará un endoscopio para observar el interior del conducto.
- Tras determinar la zona, el cirujano introduce el dispositivo urolift a través del cistoscopio (podéis ver el dispositivo en la imagen) y al llegar a la próstata comprime el lóbulo inclinando ligeramente el dispositivo hacia un lado. A continuación inicia la colocación del implante accionando un “gatillo” que despliega una aguja con un hilo muy resistente hasta atravesar la cápsula prostática que rodea a la misma. En ese momento desplegará una lengüeta que mantendrá el tejido prostático comprimido liberando así el conducto uretral.
- Este proceso se realiza en el otro lado del mismo modo y las veces que sean necesarias hasta la liberación de la uretra. Normalmente se usan entre 2 y 6 implantes urolift.
- Una de las partes interesantes del sistema urolift es que el cirujano puede observar, mediante un endoscopio, si la operación ha sido un éxito o si por el contrario se requiere otro implante.
- Tras la intervención, el paciente permanece algunas horas en el hospital hasta que se le haya pasado la sedación y puede volver a casa por su propio pie.
A pesar de que existen diversas técnicas quirúrgicas para llevar a cabo la operación de próstata, ésta consiste principalmente en aliviar los molestos síntomas de la próstata agrandada, ya que la molestia e incluso el dolor que pueden llegar a producir disminuyen considerablemente la calidad de vida de los por nuestra Dirección Médica.
Fecha de publicación: 17-11-2014
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