El cuidado de personas enfermas y de la tercera edad representa un verdadero problema para Alemania. Representantes del sector de saludadvierten que hasta finales de esta década harán falta alrededor de 220.000 personas cualificadas en ese sector. Por ello, Alemania apuesta por personal extranjero para atender a su población cada vez más vieja.
Sobre todo los países del sur de Europa como España, Grecia, Italia y Portugal están en la mira de Alemania. Como respuesta a una interpelación de la fracción parlamentaria de la Izquierda, el gobierno alemán señaló que en esos países "existen suficientes candidatos adecuados debido a la situación de su mercado laboral".
El potencial, en efecto, es grande porque los programas de ahorro a consecuencia de la crisis financiera y bancaria han mermado el mercado laboral en el sur de Europa. Alemania también ha llegado a acuerdos con Bosnia-Herzegovina, Serbia, Túnez y Filipinas. En el marco de un proyecto se traerán a 150 sanitarios chinos a Alemania.
"Fuga de cerebros" en los países de procedencia
El parlamentario Niema Movassat, de la Izquierda, teme consecuencias negativas para los países donde se recluta el personal sanitario. "En algunos ya existe una escasez de personal y su captación agrava el problema sanitario".
Movassat dice que ONGs le han hecho hincapié en el problema. El parlamentario critica que con subsidios alemanes primero se desarrolle el sector de salud en países en vías de desarrollo y, después, el personal formado emigre a Alemania. Movassat indica que la Cooperación Técnica Alemana GIZ ayudó a traer a personal sanitario de Vietnam e Indonesia a Alemania.
El gobierno alemán ha respondido que se atiene al derecho internacional como el código de conducta de la Organización Mundial de la Salud(OMS) sobre el reclutamiento de personal sanitario que prohíbe reclutar personal en países con menos de 2,29 enfermeros por 1.000 habitantes. Este límite todavía permite la asistencia médica del 80 por ciento de la población. Este es el caso, por ejemplo, de Vietnam e Indonesia. Sin embargo, las directrices de la OMS solo se refieren a un reclutamiento activo, y según informaciones del gobierno alemán, ahí el personal cualificado no fue reclutado "activamente".
Necesidad de actuar
El ministro de Salud, Daniel Bahr, reitera que "solo hemos firmado acuerdos con países que no tienen escasez de personal". El político no ve ninguna alternativa al reclutamiento en el extranjero y hace hincapié en la necesidad de actuar: "Tenemos una competencia muy fuerte por esa mano de obra y, si no actuamos, ésta se irá a Suiza, Gran Bretaña o aEscandinavia".
Hubert Röser, de la Asociación Alemana de Servicio Ambulante y Estacionario de Salud, concuerda con el ministro en que el personal sanitario extranjero es imprescindible. "Sin embargo, es aún más importante solucionar los problemas estructurales de Alemania para hacer más atractivo el trabajo en el sector salud", opina.
Representantes del sector temen que el reclutamiento de personal del Extremo Oriente podría fracasar debido a las diferencias culturales y problemas de comunicación entre paciente y enfermero. Röser demanda un aumento salarial y mejores condiciones de trabajo.
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