jueves, 29 de agosto de 2013

AUSTRIA


DIAGNOSTICAN “LLEGATARDISMO” A UN HOMBRE QUE NO PUEDE EVITAR ACUDIR SIEMPRE CON RETRASO A LAS CITAS


 
La mayoría tenemos un amigo al que siempre tenemos que andar esperando cuando quedamos para ir a cualquier lado. Da igual lo que sea o para qué sea, aunque quedemos en el mismísimo portal de su casa, bajará tarde.
Jim Dunbar es uno de esos; ha llegado tarde a los sitios durante toda su vida si que pudiera hacer nada por evitar su impuntualidad. Da igual de cuántos relojes se rodee, llega tarde a sus citas sí o sí. Por ese motivo, la vida de Jim Dunbar ha sido un caos toda su vida: ha perdido decenas de empleos, ha hecho enfadar a ligues y amigos, y sus familiares están hasta el gorro de él.
Ahora, la impuntualidad crónica de este escocés de 57 años ha sido diagnosticada como enfermedad (en una cita en el hospital a la que, por supuesto, llegó una hora tarde), un extraño trastorno que le impide llegar puntual a sus citas.
Esto se debe a que su cerebro es incapaz de estimar correctamente cuánto tiempo ha transcurrido desde que comienza una actividad, por tanto, aunque quiera llegar a las 17:00 a un sitio, no lo logrará, porque su cerebro no sabe calcular el tiempo de manera precisa. La enfermedad afecta a la misma parte del cerebro que el trastorno por déficit de atención con hiperactividad.
No obstante, sus familiares no le creen y piensan que se trata de una más de sus excusas.
Una vida sumida en el caos absoluto
Recientemente, Jim intentó ir al cine. La sesión era a las 19:00, así que decidió darse un margen de once horas para llegar a la hora. Se levantó a las 8:15 y estuvo todo el día recordándose que debía asistir al espectáculo a las 19:00. A pesar de ello, llegó 20 minutos tarde.
Veinte minutos no es mucho si tenemos en cuenta que una vez hizo esperar cuatro horas a un amigo para irse de vacaciones. “Quedamos en que lo recogería a medio día para irnos de viaje yllegué cuatro horas tarde. Mi amigo estaba furiosos porque perdimos el ferry que teníamos reservado”, relata para Evening Telegraph.
“En otra ocasión, otro amigo me invitó a comer y llegué más de tres horas tarde”. “Me he estado culpando toda mi vida por mi terrible impuntualidad ¿por qué no puedo llegar a tiempo a las citas? Ahora sé que es un trastorno y esto me ha aliviado mucho”.
Quién sabe, puede que ese amigo tardón que tenéis también tenga un trastorno similar.

Rollitos de pan con jamón ibérico


INGREDIENTES:

  • Baguette de pan
  • Jamón ibérico


PREPARACIÓN

  1. Cortamos la baguette en partes iguales y sacamos la miga del interior.
  2. Colocamos el jamón ibérico en los huecos dejando siempre una parte del mismo a descubierto
  3. Servimos en una bandeja

Una receta muy sencilla y con una presentación excelente para cualquier momento. 

Muy adecuado para ocasiones en las que haya niños.

Una mujer que no envejece abre las puertas de la inmortalidad

Una mujer que no envejece abre las puertas de la inmortalidad
Los médicos y científicos dicen que el caso de Brooke Greenberg, más conocida por 'la niña que no envejece', es único en el mundo.
Brooke es una joven de 20 años atrapada en el cuerpo de un bebé. Todavía posee dientes de leche y sus medidas son realmente impactantes: mide 75 centímetros y pesa siete kilos.
Científicos y médicos de medio mundo se pregunta, sin obtener respuesta por el momento, cual es el motivo por el que Brooke no crece. Además, tras numerosas investigaciones, entienden que este caso podría ser la clave que respondiese a la pregunta de por qué envejecemos.
Muchos coinciden que es el único caso en el mundo y según publica The Times, ningún médico consigue ponerle nombre al trastorno que padece la joven.
Podría vivir 150 años
Al salir a la luz el trastorno de la joven, muchos ya están hablando de la eterna juventud. Y es que se calcula que si el ritmo de crecimiento de la joven no varía en los próximos años, podría vivir hasta los 150 con la misma apariencia física que tiene hasta el momento, la de un bebé. 
Por eso, el caso ha levantado cierta expectación especialmente en la comunidad médica, donde se preguntan si localizando el gen alterado que produce ese efecto podrían emplearlo para replicarlo tan solo en el momento en que el cuerpo en lugar de evolucionar favorablemente, inicia su deterioro, modificando así la "inercia del desarrollo".
El gran problema está en que, pese a que ella no envejece físicamente, sí lo hace su organismo, que va cumpliendo años y en varios momentos se ha temido por su vida al sufrir infartos cerebrales, espasmos, úlceras y dificultades respiratorias.

Las diez comidas y cenas más importantes de la Humanidad

"La última cena", de Leonardo Da Vinci.
Hay innumerables tipos de cenas y comidas: más o menos divertidas, entrañables, de trabajo, de compromiso, románticas, de trámite, rápidas, lentas, de larga sobremesa… También hay bacanales, tripoteras, tentempiés, caterings, cenas con música en directo y tapeos sobre cuerpos desnudos. Pero luego están las cenas y comidas importantes, aquellas que tienen un lugar propio en la historia (y prehistoria e intrahistoria) de la Humanidad por su significado, sus protagonistas, sus circunstancias o lo que se trató o se comió en ellas.
Cierto es que generalmente en estos ágapes parecería que lo menos importante es lo que hay sobre el mantel, pero si uno lo analiza de forma más pormenorizada resulta que en el caso de las viandas, como ocurre en el ajedrez, el orden (y la naturaleza) de los factores sí altera el producto final. Así por ejemplo, si la malvada Eva hubiera dado a probar al inocentón de Adán un cochinillo asado en vez de una sana y pura manzana, ¿alguien podría aventurar si hubiera el mismo el destino de la Humanidad al multiplicarse por no sé cuantos el pecado original?
Pues bien, dejando las interpretaciones al buen juicio del lector, en Actualidad Gastronómica nos hemos propuesto reunir diez de las cenas y comidas más importantes de la historia (y prehistoria y mitología, y religión) de la Humanidad.
1) La manzana de Adán. Nuestros primeros padres se decantaron claramente por un menú frugal y vegetariano para su primer ágape pecaminoso. Al margen de que pueda resultar curioso que una simple manzana desatara las iras del Dios implacable del Antiguo Testamento (¿qué hubiera pasado si Adán y Eva se hubieran aliado con Satanás para apretarse unas gallinejas, hubiera llegado en Juicio Final ipso facto?), no cabe duda de que ese inocente tentempié supuso al mismo tiempo el primer acto revolucionario del género humano.
Es cierto que nos expulsaron del Paraíso, pero no es menos cierto que tal decisión trajo aparejadas otras benditas maldiciones, como el pecado de gula, la moda (que empezó con esos taparrabos tan bíblicos) o el sexo pecaminoso.
2) La última Cena. Es la cena de todas las cenas y, como en el caso anterior, no destacó precisamente por la variedad del menú. Sin embargo, pese a la simpleza de la carta, podemos decir sin temor a equivocarnos que quien apostó para aquel día por el pan y el vino acertó de lleno, pues desde luego ha sido y sigue siendo imitado hasta la saciedad, millones de veces cada día en otras tantas iglesias y parroquias de todo el orbe.
Además, si bien en el aspecto estrictamente culinario no fue para quitarse el sombrero (a diferencia de otros ágapes como las bodas de Canaan, para qué negarlo) desde luego fue bastante intensa, ya que además de ser pieza central de la simbología católica estuvo rodeada de acontecimientos la mar de interesantes (traiciones, detenciones, transfiguración del pan en carne y el vino en sangre, lavatorio de pies, etcétera).
3) El Banquete de Platón. No sabemos si el poeta Agatón sabía que su banquete iba a dar tanto de sí cuando convocó a sus amigotes a comer en el 416 antes de Cristo. El caso es que tras ponerse hasta arriba de viandas y vino el susodicho y otros compadres como Sócrates, Aristófanes,Pausanias o Erixímaco acabaron hablando de Eros, o sea, del amor, y claro, la liaron parda, hasta el punto de que Platón no pudo dejar pasar la ocasión de dejarnos como legado un texto que, claro, dio origen al concepto de amor platónico, que tanto daño ha hecho luego.
4) El menú del Corán. Pero no sólo la tradición católica hace referencia a los alimentos; también el Corán recoge un episodio que demuestra por qué Moisés no se quedaba manco en temas culinarios. Una de las primeras referencias es en el Sura II–54, cuando Moisés dice lo siguiente:“Hicimos que se cerniese una nube sobre vuestras cabezas y os enviamos el maná y las codornices, diciéndoos: comed manjares deliciosos que nosotros os hemos concedido”. Y prosigue: “Y entonces vosotros dijisteis: ¡Oh Moisés! No podemos soportar por más tiempo un mismo y único alimento; ruega á tu Señor que haga brotar para nosotros de esos productos de la tierra, legumbres, cohombros, lentejas, ajos y cebollas”, algo que a Moisés no le pareció del todo bien, pues amenazó con devolver a Egipto al pueblo judío.
También en esta línea, aunque en este caso pudieran existir razones sanitarias en el origen, el Corán recoge la prohibición de comer ciertos alimentos, prohibición que se mantiene en nuestros días: “Os está prohibido comer los animales muertos, la sangre, la carne de cerdo, y todo animal sobre el cual se haya invocado otro nombre distinto del de Dios”. No obstante, parece apelar a la indulgencia al añadir: “El que lo hiciese, movido por la necesidad, y no como rebelde y trasgresor, no será culpable. Dios es indulgente y misericordioso”.
5) El mayor banquete. Mientras no se demuestre lo contrario, porque los nuevos o futuros descubrimientos arqueológicos encuentren nuevas evidencias, el mayor banquete de la antigüedad, el más fastuoso y pantagruélico fue el acontecido con ocasión de la celebración del final de la reordenación urbanística de la ciudad de Kalah por el rey Asurbanipal II (883-859 a.C.), el cual la convirtió en capital del reino de Mesopotamia, quitando tal honor a Nínive. Según relata Karlos Azcoytia en Historiacocina.com, al banquete, que duró diez días, fueron invitados ni más ni menos 69.574 comensales. También invitaron al dios Asur, el Gran Señor de los dioses de todo el país, aunque no sabe si acabó acudiendo o no.
El caso es que los invitados dieron buena cuenta de 1.200 bueyes; 1.000 terneros y corderos de establo; 14.000 cabritos; 2.000 corderos; 500 ciervos; 500 antílopes; 1.000 patos grandes; 1.000 ocas; 1.000 becadas; 1.000 codornices; 10.000 pichones; 10.000 tórtolas; 10.000 pajaritos y 10.000 jerbos; todo esto en el capítulo de carnes. También se comieron 10.000 pescados variados; 10.000 huevos y 10.000 panes de considerable tamaño. Pero faltan las bebidas: 10.000 jarras de cerveza y 10.000 odres de vino.
Azkoytia agrega que conociendo la sofisticación de la cocina mesopotámica, se acompañó a estas viandas como guarniciones y condimentos los siguientes alimentos: 10.000 cántaros de grano de sésamo y otros; 1.000 cestas de legumbres; 300 jarras de aceite; 300 porciones de sal en grano; 100 jarras de jugo de granada; cien serones de racimos de uva; 100 porciones de frutas; 100 de pistachos; 100 cargas de trenzas de ajos; 100 trenzas de cebollas; 100 cargas de manojos de nabos; 100 jarras de miel; 100 porciones de mantequilla clarificada; 100 de lentejas tostadas; 100 medidas de leche; 100 de queso y un sinfín de alimentos cuyos nombres no tienen traducción.
Como no es de extrañar, el rey Asurbanipal II se quedó bastante satisfecho tras el convite (otra cosa sería cómo quedaron las arcas del Estado) y quiso dejar para la posteridad unas palabras: “Cuando inauguré el palacio de Kalah, alimenté de esta manera, durante diez días a 47.074 hombres y mujeres que había invitado de todas partes de mi reino, así como a 5.000 representantes de diversos países, más 16.000 habitantes de Kalah y 1.500 miembros del personal de mi palacio, o sea, en total 69.574 invitados, a los que di de comer y beber y a los que proporcioné lo necesario para su aseo. ¡Así los honré antes de enviarlos a sus casas en buena armonía y alegría!”. Decimos muchas veces que la monarquía está en crisis pero claro, es que ya no quedan reyes como estos.
6) El huevo de Colón. Tras la magnificencia de Asurbanipal II volvemos a la frugalidad, en este caso de raíces ibéricas. Más que una comida se trató de una demostración culinaria, comparable quizá en nuestros días a esas que se ven a veces en Madrid Fusión. Lo que está claro es que la forma que tuvo Colón de poner un huevo de pie demostró entre otras cosas que a veces se puede llevar a cabo de la forma más sencilla el propósito a priori más complejo, un concepto que la alta cocina ha sabido emplear como se merece.
7) El funeral más alcohólico. En la antigua civilización griega era tradicional que los funerales estuvieran culminados por un buen banquete, máxime si el finado era un rey. ¿Y qué rey ha sido, es y será más rey que el mismísimo rey Midas? El monarca que gobernó Frigia (actual Turquía) en el siglo VIII antes de Cristo quiso cerrar su existencia con un monumental ágape en el que el alcohol, en forma de vino e hidromiel, fue uno de los grandes protagonistas.
De hecho, en las excacaciones realizadas en 1957 se encontraron tres enormes calderos de 125 litros de capacidad que contuvieron una mezcla de vino e hidromiel, así como 100 copas de bronce, lo que indica que cada invitado al funeral trasegó al menos 3,5 litros de alcohol. Los investigadores también creen que el menú fúnebre incluyó guiso de cabra, cordero y lentejas. Con funerales así, que se quiten los bautizos.
8) Una cena romántica de 15 millones de euros. El amor mueve montañas, dicen. No sabemos si esto es cierto, pero desde luego sí parece que el sentimiento más cantado por poetas y juglares de todas las épocas es capaz de motivar buenos ágapes. Uno de los más conocidos es el que ofrecióCleopatra a Marco Antonio allá por el siglo I antes de Cristo, después de ambos se enamoraran apasionadamente.
Al parecer arrastrada por la pasión la reina egipcia apostó a Marco Antonio que era capaz de despachar con su amante una cena de diez millones de sextercios lo que, según los historiadores, serían unos 15 millones de euros de hoy. Marco Antonio aceptó el reto.
Al parecer la cena no fue nada del otro mundo, pero la sorpresa llegaba con el postre. Cleopatra llevaba al cuello dos gruesas perlas valoradas en cinco millones de sextercios cada una, según el parecer de un tal Planco, elegido como juez para el reto. Acto seguido, Cleopatra introdujo una de ellas en una copa con vinagre, lo que provocó su disolución, y acto seguido se lo echó al gaznate.Cuando iba a hacer lo propio con la segunda, Marco Antonio se dio por vencido.
9) La mantanza más antigua. Es cierto que la Cueva de Altamira, la mejor expresión de arte rupestre que ha llegado hasta nuestros días, no representa ningún banquete. Si la incluimos en esta lista es porque refleja precisamente la antesala de uno de los ágapes más antiguos de los que tenemos referencia, si bien de forma indirecta. ¿Acaso se puede dudar de que la escena de caza de bisontes que de forma tan excelsa aparece pintada sobre el techo de Altamira, fechada hace 15.000 años, no fue seguida por un festín cárnico que hizo temblar el misterio entre nuestros antecesores prehistóricos? ¿Acaso se puede desvincular la emoción del momento de la caza o la pesca del instante en el que la pieza cobrada acaba en nuestras fauces?
10) Primer comensal en el espacio. Es sabido que, pese a que los estadounidenses fueron los primeros en llegar a la Luna, los primeros éxitos en la carrera espacial cayeron del lado soviético. Así, si Yuri Gagarin fue el primer hombre en orbitar el globo terráqueo y salir al espacio, su compatriota German Titov, quien voló el 6 de agosto de 1961 a bordo de la Vostok 2, fue el primer hombre en comer fuera de nuestra querida Tierra. Sentando la base para sus compañeros en el futuro, el menú de Titov fue más bien frugal, y estuvo compuesto por una crema de verduras, una lata de pasta de hígado y zumo de grosella.
La apuesta por la comida ligera ha seguido siendo desde entonces la tónica general allende nuestra atmósfera y así, pese a todo lo que ha avanzado la aventura espacial en las últimas décadas, todavía está por llegar el que se meta entre pecho y espalda un buen asado de lechazo burgalés (por ejemplo); seguro que en ese caso los problemas con la ausencia de gravedad serían menores.

El PP denuncia a Tomás Gómez en el Supremo por un “pufo” de 42 millones en el tranvía de Parla y obras millonarias “a dedo”

FOTO DENUNCIA TS
  • El PP descubre que 42 millones aprobados en 2007 para el tranvía no aparecen reflejados en las cuentas de intereses, por valor de 256 millones, que se pagarán hasta 2037
  • Además, el líder del PSM y su sucesor incrementaron el precio final del tranvía en un 40% al adjudicar obras extras sin concurso público y saltándose la ley
  • Victoria exige que Gómez explique “en qué se gastó esos 42 millones”, en lo que considera “uno de los mayores escándalos de corrupción en la política madrileña”
  • La denuncia por malversación de caudales públicos y prevaricación afecta también al actual alcalde y a 14 concejales, entre ellos, la diputada del PSM Rosa Alcalá
El presidente del Comité Electoral del PP de Madrid y diputado regional, Salvador Victoria, y el portavoz del PP de Parla, Miguel Ángel López, presentaron hoy en el Tribunal Supremo una denuncia contra el secretario general del PSM, Tomás Gómez, por malversación de caudales públicos y prevaricación, al dejar un “pufo” de 42 millones en el tranvía de Parla, dinero de los vecinos que se desconoce a qué ha sido destinado, y haber adjudicado obras millonarias “a dedo”, que incrementaron el precio final del tranvía casi un 40 %, de 93 a 130 millones.
Salvador Victoria explicó que el PP de Parla ha descubierto un “saqueo” de 42 millones en el tranvía de la ciudad cuando Tomás Gómez era alcalde. El Consorcio Urbanístico Parla Este (formado por la Comunidad y el Ayuntamiento) aprobó en 2007 destinar esta partida a la adjudicataria del tranvía, pero  esos 42 millones no aparecen reflejados en las últimas cuentas aprobadas el pasado mes de julio de 2013 por el Consistorio para pagar hasta 256 millones con  los intereses de la deuda de esta infraestructura durante 30 años (desde que se puso en marcha el servicio en 2007 hasta 2037).
“Se ha producido un “saqueo” a los vecinos de Parla y el señor Gómez deberá explicar ante la justicia dónde están los 42 millones que se aprobaron para el tranvía”, exigió Victoria, en lo que consideró “uno de los mayores escándalos de corrupción la política madrileña”.
El PP de Madrid denuncia, además, a Tomás Gómez por un delito de prevaricación por varias obras añadidas a las del tranvía de Parla, que justificaban como necesarias para esta infraestructura aunque no lo eran, y que incrementaron el coste final en más de 36 millones de euros, casi un 40% sobre la adjudicación inicial (93 millones).
Algunas de estas obras poco tienen qué ver con la concesión original del tranvía, como la demolición y el nuevo proyecto de la Casa de la Juventud, la remodelación de la calle Real, nuevos colectores de agua, la construcción de aparcamientos o la remodelación de la estación de Cercanías, en la que se comprometió a colaborar el Gobierno central del PSOE, pero que al final el Consistorio cargó por completo a este proyecto.
Adjudicaciones saltándose la ley
Estas obras se adjudicaron en 2006 con Gómez como alcalde y en 2009 ya con su sucesor, el también socialista Jose María Fraile, por lo que la denuncia va contra ambos y contra los 14 concejales del PSOE que en esos años formaban parte de las Juntas de Gobierno en las que se aprobaron dichas obras extra, entre ellos la actual diputada regional Rosa Alcalá o el ahora asesor jurídico del PSM Wilfredo Jurado. Todas estas obras se adjudicaron sin partida presupuestaria, sin concurso público (todas superan los 50.000 € que la ley permite adjudicar directamente) y sin modificar legalmente el contrato inicial de las obras del tranvía.
Fraude en las cuentas

Asimismo, y el portavoz del PP de Parla, Miguel Ángel López, acusó de “fraude” a los miembros de la actual Junta de Gobierno del municipio porque el reequilibrio de 256 millones de euros con los intereses del tranvía y el calendario de pagos no ha sido aprobado por el Pleno Municipal ni por el órgano de contratación (Consorcio Regional de Transportes), a pesar de lo cual Fraile sí lleva más de un año aceptando facturas en base a dicho reequilibrio.
Por ejemplo, ya el año pasado aprovechó el Plan de Pago a Proveedores del Gobierno central para, entre otras muchas, pagar sus deudas con el tranvía (más de 40 millones de euros solo hasta 2011) incluyendo ya ese reequilibrio total solicitado por la empresa y que en ese momento nadie había aprobado ni autorizado legalmente, a pesar de lo cual Fraile lo aceptó y pagó con los créditos del Gobierno central. Y lo mismo ha vuelto a hacer con plan de este año 2013.

Preocupación por el estado de salud de Lina Morgan

Preocupación por el estado de salud de Lina Morgan
Lina Morgan, de 76 años, no pasa por su mejor momento. Este verano ha sido ingresada en dos ocasiones. La primera vez que le ingresaron de urgencia fue el 16 de julio hasta el uno de agosto. Como apunta la revista 'Lecturas', no se sabe prácticamente nada sobre este incidente, solo que volvió a su domicilio madrileño con un tratamiento y pastillas para el corazón.
El segundo ingreso tuvo lugar del 18 al 22 de agosto. En esta ocasión, su chófer y amigo de confianza explicaba a los medios qué es lo que le había pasado. "Empezó a encontrarse mal, con mucha tos y vomitando sin parar. Llamé al médico y me dijo que si en dos horas no dejaba de vomitar le llevara a urgencias, y así lo hice", confesó el chófer.
Los médicos prefirieron dejarla ingresada para poder observarla mejor. No estaba muy claro qué le pasaba, así que realizaron numerosas pruebas. En la actualidad la artista está en casa, recuperándose y siguiendo las instrucciones médicas. Aparte de estos datos, poco más se sabe de su estado de salud.
Su última aparición pública fue en el estreno de la obra teatral 'Sofocos', al comienzo del verano.

Asi va la ribera a las 10 de la noche 28 de Agosto 2013