viernes, 1 de noviembre de 2013

400 golpes, certeros.

Por MANUEL MARLASCA.

Os seguimos echando de menos, queridas Cristina, Rocío, Katia, Belén y María Teresa. ¿Y sabéis qué es lo más grave? Que un año después todavía no se ha hecho justicia. El juzgado que trata de aclarar lo ocurrido lleva escritos 9.491 folios que están repartidos en 28 tomos. Pero todavía no se ha hecho justicia. Han sido imputadas 24 personas. Pero todavía no se ha hecho justicia. Se han contado una y mil veces las entradas vendidas o regaladas o duplicadas, que fueron más o menos el doble del aforo permitido. Pero todavía no se ha hecho justicia. ¡Ah! y el empresario o como se llame a “eso” que organizó no una fiesta, sino una tragedia, de la que vosotros cinco fuistéis las víctimas mortales, está en libertad bajo fianza de 200.000 euros, importe que puede parecer mucho, aunque el empresario dijo aquello de “eso lo reúno yo en un rato”. Y lo reunió, pero ni entonces ni ahora se ha hecho justicia. En el Ayuntamiento de Madrid han cesado a no sé cuántos cargos, y la alcaldesa sigue ahí, porque volvió del “puente” en que Madrid era un dolor y un luto por vuestra muerte y que ella disfrutó con su marido en Portugal. Pero todavía no se ha hecho justicia ni tampoco ha dimitido la señora alcaldesa que se confiesa dispuesta a cambiar el nombre de Madrid Arena (¡qué arrojo, qué eficacia, qué decisión tiene la señora alcaldesa!) , que tanto recuerda la tragedia. Pero ni vosotras ni vuestras familias sabíais nada de lo que podía ocurrir en el dichoso “show” ese del Dj Aoki la noche de “halloween” del pasado año. Nadie os dijo que aquello era una ratonera ni que los servicios médicos estaban atendidos por un viejo médico y su hijo, también médico, y un ATS igualmente de edad avanzada, que no disponían de lo imprescindible para unos primeros auxilios ni de desfibrilador ni de decisión ni de pericia y que venga Hipócrates y lo vea.

Y todavía no se ha hecho justicia. Se cumple un año de una tragedia que jamás debió ocurrir y, lo que es peor, que pudo haberse evitado. Pero aún andan las partes –como se dice en Derecho- discutiendo si imprudencia o dolo… Es decir, Cristina, Rocío, Katia, Belén, María Teresa, todavía no se os ha hecho justicia y os seguimos echando de menos a vosotras y… a la Justicia.

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