Iñaki Urdangarin tiene una oferta sobre la mesa para marcharse a trabajar a Catar con vistas a preparar el Mundial de balonmano que el emirato albergará en 2015. La propuesta se la habría hecho llegar su íntimo amigo Valero Rivera, según afirmó la Cadena Cope.
Rivera, que este domingo dirigió su último partido como seleccionador nacional antes de marcharse a dirigir al combinado catarí, es el único entrenador que tuvo el duque de Palma durante los 14 años que militó en el Barcelona. Durante este tiempo Urdangarin fraguó una estrecha relación con el técnico que no se ha visto afectada por los últimos reveses judiciales y la imputación del marido de la infanta en el ‘caso Nóos’. La cercanía entre ambos quedó patente el pasado 27 de enero. «Iñaki es un amigo y lo está pasando muy mal. Siempre me tendrá a su lado. Pase lo que pase lo considero un amigo y todo el mundo tiene derecho a equivocarse», señaló ese día el entrenador instantes después de que la selección, con el duque de Palma sentado en primera fila, se proclamara campeona del mundo en Barcelona.
El seleccionador, que percibirá en Catar un sueldo en torno a los 800.000 euros anuales, es una de las piedras angulares del proyecto mundialista diseñado por las autoridades del emirato, muy interesadas en la proyección exterior del país. Catar no está escatimando millones para lograr este objetivo y a golpe de talonario ya se ha hecho con los servicios de algunas de las más importantes figuras del balonmano mundial, entre las que el duque de Palma ha gozado de gran prestigio dada su condición de exjugador profesional y su vinculación con el olimpismo. Se da el caso, además, del clima de cercanía que existe entre la Familia Real y la del emir catarí Hamad Bin Jalifa al-Thani. En la última visita de este y su esposa la jequesa Mozah bint Nasser Al Missned a Madrid los Reyes acudieron a recibirlos al aeropuerto, una deferencia poco habitual hacia las autoridades extranjeras.
Sin empleo
El duque de Palma se encuentra actualmente sin empleo después de que en agosto del año pasada solicitará una excedencia temporal en Telefónica «ante la posibilidad de que el procedimiento judicial abierto pudiera tener alguna incidencia negativa para el grupo», según explicó entonces el duque en un comunicado. A la falta de ingresos por carecer de empleo se suma su obligación de hacer frente junto a su exsocio Diego Torres a la fianza de 8,2 millones que les impuso el juez José Castro. Aceptar la oferta de su amigo Valero Rivera podría suponer un soplo económico para las finanzas del duque de Palma.
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