martes, 10 de julio de 2012

Europa adelantará 30.000 millones a España, pero impone claras condiciones

Mario Draghi, con Luis de Guindos

España tendrá a su disposición antes del fin de julio 30.000 millones de euros para hacer frente a las necesidades más urgentes de sus bancos, según el acuerdo alcanzado por el Eurogrupo, que impondrá a cambio claras condiciones a toda la banca del país y a la política económica del Gobierno.

Este primer paquete de ayuda se presenta como una "contingencia", para hacer frente a las situaciones más acuciantes y, a priori, debería ir en gran parte a recapitalizarBankia y el resto de entidades nacionalizadas.
El monto total de la asistencia financiera —que puede alcanzar hasta 100.000 millones de euros— sólo se determinará a finales de septiembre, cuando se conocerán las necesidades exactas de todos los bancos gracias a los resultados de la evaluación pormenorizada de las carteras crediticias encargada por el Gobierno y a las pruebas de resistencia individualizadas.
Las condiciones, sin embargo, ya están pactadas y se fijarán definitivamente el 20 de este mes, pero se sabe que elvencimiento de los préstamos, que se transferirán en varios tramos, tendrá una media de 12,5 años y un máximo de 15 años, como explicó el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
La banca española será dividida en cuatro grupos: aquellas entidades que no necesitarán capital, las que están bajo control del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), los bancos que requieren capital y apoyo público y los que necesitan capital pero que se prevé puedan recapitalizarse en el mercado.

Con condiciones

A cambio de esas ayudas, Europa impondrá condiciones a los bancos rescatados siguiendo las reglas de ayudas de Estado.

Por ejemplo, se aplicará la "segregación de activos" en aquellos bancos que reciban ayuda pública en compañías específicas de gestión de activos, inmobiliarios en este caso, es decir se creará un "banco malo", explicó el presidente del grupo de trabajo del euro, Thomas Wieser.
Las condiciones serán también para el conjunto del sector y todas las entidades tendrán que cumplir con el requisito de contar con el 9% de capital de máxima calidad, como ya hacen las más grandes.
El Estado tampoco se librará de nuevas obligaciones, tal y como se encargó de dejar claro el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Olli Rehn. "España tendrá que cumplir plenamente con sus compromisos bajo el procedimiento por déficit excesivo y las recomendaciones para corregir los desequilibrios macroeconómicos", aseguró.
Es decir, que el gobierno de Mariano Rajoy se verá obligado a subir el IVA, eliminar ladeducción por viviendarebajar la imposición sobre el trabajo y cumplir con otras posibles futuras recomendaciones de Bruselas a cambio del dinero.

Recapitalización directa y sin garantías

España podrá beneficiarse de la recapitalización directa de sus bancos desde los fondos europeos de rescate y no tendrá que garantizar esas inyecciones, algo que el gobierno español demandaba.
La condición que pusieron los líderes para esa vía es la puesta en marcha de un supervisor bancario europeo, con la participación del Banco Central Europeo (BCE). Según anunció el Eurogrupo, la Comisión Europea presentará a principios de septiembre sus propuestas para la creación de ese nuevo supervisor, mientras que el Consejo las tratará de forma "urgente" antes de fin de año.
"No se requerirán garantías soberanas", zanjó en la rueda de prensa celebrada tras la reunión de ministros el presidente del grupo de trabajo del Eurogrupo, Thomas Wieser.
La ayuda financiera solicitada por España a sus socios europeos bajo unas condiciones más flexibles, y sin la participación del Fondo Monetario Internacional (FMI), ha alentado la esperanza de los tres países rescatados, Grecia, Irlanda y Portugal, de poder renegociar las condiciones impuestas en sus respectivos rescates.
El Eurogrupo deja así la puerta abierta a una renegociación del rescate irlandésque "se examinará durante el verano", según afirmó escuetamente Jean-Claude Juncker.
Respecto a Grecia Juncker, afirmó que el país no tendrá problemas para hacer frente al pago de sus deudas en agosto, pese a que el país no recibirá más ayuda financiera hasta que sus socios no den el visto bueno a su plan de reformas económicas, previsiblemente en septiembre.

Pendiente de la cantidad exacta

El presidente del grupo de trabajo del Eurogrupo, Thomas Wieser, ha afirmado que a finales de septiembre se conocerán las necesidades de capital exactas, una vez se sepa a fines de mes el resultado de la evaluación pormenorizada de las carteras crediticia de la banca española que el Gobierno encargó a las cuatro auditoras PwC, Deloitte, Ernst & Young y KPMG y se haya llevado a cabo el test de estrés a cada uno de los bancos españoles.
El Eurogrupo ya dispone de la evaluación independiente de las consultoras Roland Berger y Oliver Wyman, que estima que la banca española necesitará entre 51.000 y 62.000 millonesde euros para afrontar hasta 2014 un hipotético escenario económico muy adverso.
Una vez se tengan las cifras exactas, la recapitalización podrá comenzar, así como la reestructuración de los bancos débiles, basada en planes para solucionar la escasez de capital identificada y en la "segregación de activos" en aquellos bancos que recibirán ayuda pública en compañías específicas de gestión de activos, inmobiliarios en este caso, es decir se creará un "banco malo", señaló Wieser.

"Muy buenos acuerdos" para De Guindos

El ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos afirmó que España ha logrado "dos muy buenos acuerdos" en la reunión del Eurogrupo. Sin embargo, De Guindosevitó comentar los detalles de lo pactado en la reunión, que se ha prolongado nueve horas, y se limitó a confirmar que se han cerrado las condiciones de la ayuda financiera a España.
El Eurogrupo también ha decidido conceder a España un año más para el cumplimiento de sus objetivos de reducción del déficit, a cambio de que el país se comprometa a realizar más reformas económicas y a controlar el gasto de las Comunidades Autónomas. Pero los ministros de Economía de la zona euro han decidido también el nombramiento de tres cargos económicos clave, reparto en el que España se ha ido con las manos vacías.